En este último periodo económico el bache más difícil de superar ha sido el tema del desempleo, un tema candente no solo para la economía mexicana sino para otras tantas como la estadounidense y la europea con el caso de España.
A las puertas de elecciones los gobernantes tratan de opacar las cifras rojas en función de mayores votantes, que les permitan seguir en un lugar de poder social y económico.
Es por esto que en vísperas de elecciones de 2012 en México y EE.UU no sorprende que el gasto público domine la agenda política hasta dicho periodo. Sin embargo para el caso español está más difícil, ya que la implicación de reducir su déficit, pone en la cuerda floja a el gasto público como instrumento de permanencia en el poder.